Cristina & Jose

Quiero aclarar que una boda sencilla para mí nada tiene que ver con una boda barata o sin detalles. Una boda sencilla para mí es una boda rodeada de gente a la que quieres, contar con profesionales de calidad, ofrecer una comida y un servicio de calidad, buena música para que tus invitados disfruten y decoración personalizada… Así entiendo yo una boda sencilla.

Mi boda

Una boda sencilla, así fue mi boda y así es como he querido titular este post. Creo que no soy una wedding planner al uso, porque nunca me había imaginado que me casaría, aunque tenía claro que si alguna vez lo hacía sería de forma muy sencilla.

Quiero aclarar que una boda sencilla para mí nada tiene que ver con una boda barata o sin detalles. Una boda sencilla para mí es una boda rodeada de gente a la que quieres, contar con profesionales de calidad, ofrecer una comida y un servicio de calidad, buena música para que tus invitados disfruten y decoración personalizada… Así entiendo yo una boda sencilla.

Y así fue la nuestra, una boda sencilla donde los invitados eran nuestras familias cercanas y nuestros mejores amigos, gente que nos conocen y de los que estábamos deseando estar rodeados y disfrutar un día especial. Aunque a casi la mitad los tuvimos que hacer venir de mucho puntos de España debido a nuestras experiencias vitales. ¡Gracias a todos por el esfuerzo!

Decidimos que fuera una boda de Invierno, a mi me encantan y la fecha la hicimos coincidir con el día siguiente del cumpleaños de nuestra hija. Así ambas fechas estarían relacionadas siempre, pero ninguna de las dos perderían su importancia.

Al ser una boda de Invierno fue a mediodía. A mi personalmente me gusta mucho poder disfrutar de distintas luces durante la celebración de una boda. Además somos unos apasionados de los arroces y teníamos claro que queríamos un arroz caldoso, que terminó siendo de langostinos con una base de manzanilla de Sanlúcar, mi segunda tierra.

Por último, decidimos que nuestra hija eligiera un color para la capa de terciopelo que iban a llevar las niñas, un rosa fresón, y sobre eso creamos una paleta de colores.

Todas las decisiones que tomé con respecto a la boda tuvieron un punto emocional muy alto, pero siempre en equilibrio con el pragmatismo que me da dedicarme a organizar bodas. Por eso los profesionales que intervinieron eran para mí la mezcla perfecta entre excelente profesionalidad y mucha complicidad con nosotros. No podía tener en mi boda profesionales con los que no tuviera un feeling brutal para poder hablarlo todo en confianza. Y así fue.

¿Quieres saber las pequeñas curiosidades de mi boda?

Te contaré que las invitaciones las enviamos por correo postal. En esta era de tanta digitalización pensamos que a nuestros invitados les gustaría recibir una carta con buenas noticias. Nos encantó ver como nos escribian los invitados o enviaban fotos de ellos con la invitación a medida que las iban recibiendo. ¡Es un precioso recuerdo!

También decirte que decidimos que para que ambos tuviéramos intimidad para vestirnos el día de nuestra boda y también poder disfrutar ambos de nuestra hija y hacernos fotos con ella antes del enlace, alquilamos 2 suites, una encima de otra, de Suites Murillo Alcázar. A mi me encantan por sus vistas, su amplitud, y por la comodidad a la hora de desplazarse.

Además, la noche antes, aquellos invitados que quisieron se pasaron por la terraza de las suites y tomamos algo para empezar a tomarle el pulso a la boda.

¿Cómo lo viví yo?

Pufff…complicado de explicar, una mezcla de emoción y frialdad, como soy yo.

Mucha tranquilidad porque sabía que todo iba a salir bien, los profesionales implicados no dejaban duda que todo saldría perfecto y todo estaba planificado al dedillo. Mi única preocupación era cómo lo iba a vivir nuestra pequeña. Lo demás sabía que iba a ser perfecto. Quizás lo más duro fue compaginar ser novia y ser mamá, pero eso si te interesa te lo cuento en otro momento…

¿Tuve tips de wedding planner? ¡Por supuesto!

Otros eventos que podrían interesarte